Fiestas de San Bartolomé en el barrio de Caborredondo, de Oreña

ALFOZ DE LLOREDO.- Félix IGLESIAS

Las fiestas de San Bartolomé, que celebra Oreña en su barrio de Caborredondo, se iniciaron ayer con una subida al monumento donde está instalada, hace más de veinte años, una figura del Sagrado Corazón y que el pueblo de Oreña bautizó con el nombre del Cristo. La imagen, construida en piedra, tiene una altura de cinco metros y fue donada por Florentino Pino, residente en Puebla, localidad mexicana, en donde se instaló como indiano.

San Bartolomé cuenta con una capilla que data del siglo IX, que fue restaurada hace aproximadamente doce años debido al inusitado interés de los vecinos de la localidad y en el que tuvo una significada participación Valentín Usamentiaga. La capilla cuenta con un ábside admirable, así como con unas “canecillas” que describen el paso de los tiempos. Es una pena que no siempre se hagan del todo bien las cosas, pues un arco situado en la entrada poseía un marcado estilo árabe y, al eliminar los ladrillos, en mal estado por el paso de los años, ha quedado reflejado un estilo románico-asturiano bastante desigual con su estructura primitiva.

Programa de fiestas

Ayer, a las cuatro de la tarde, fue la primera subida al Cristo. A las cinco y media se celebraron juegos infantiles, a los que siguió, al filo de las siete y media, un partido de fútbol entre casados y solteros. Sobre las diez y media de la noche tuvo lugar una sardinada musical.

Hoy, a las siete, se dará la diana floreada con el disparo de cohetes y bombas. A las doce se oficiará una misa solemne en la capilla del Santo. Al filo de las tres de la tarde comenzará la inscripción para el concurso de arrastre caballar y mular, que comenzará a celebrarse media hora más tarde. A las ocho tendrá lugar la tradicional romería y a las doce finalizarán las fiestas con una verbena, que estará amenizada por el grupo “Los Blancos”.